Hermes, el desvelador, es quien despierta constantemente con su áurea vara, mantiene alerta, cual vigías, con los pies bien anclados en la Tradición al mismo tiempo que eleva todos sus anhelos de conquista y conduce sus intenciones hacia lo más alto, hacia la restauración del "estado primordial", en el que los dioses y los hombres no son sino una unidad indisoluble que habita en la morada de los "inmortales", Hermes transita por los estados del ser, conduce lo de arriba hasta abajo y eleva lo de abajo hacia arriba, en un vuelo vertical, al mismo tiempo que siembra y recolecta en todos los planos horizontales. Su energía cruciforme es educadora y no en vano se lo relaciona con las artes y las ciencias, verdaderos puentes entre los dioses y los hombres, que él mismo contribuye a revelar y engrandecer. Pero además de transmitir mensajes, ayuda a interpretarlos, los hace inteligibles al hombre que busca con corazón sincero, descifrándole los signos de los
De la oscuridad a la luz masónica. De los Masones Hispanos de Canada, en Quebec.